Bobby
Director: Emilio Estevez
Intérpretes: Anthony Hopkins (John Casey) / Freddy Rodríguez (José) / William H. Macy (Paul) / Christian Slater (Timmons) / Shia LaBeouf (Jimmy) / Brian Geraghty (Cooper) / Sharon Stone (Miriam) / Nick Cannon (Dwayne) / Joshua Jackson (Wade) / Emilio Estevez (Tim Fallon) / Demi Moore (Virginia Fallon) / Lindsay Lohan (Diane) / Martin Sheen (Jack) / Helen Hunt (Samantha) / Elijah Wood (William) / Harry Belafonte (Nelson) / Jacob Vargas (Miguel) / Svetlana Metkina (Lenka Janacek) / Laurence Fishburne (Edward Robinson) / Heather Graham (Angela) / Ashton Kutcher (Fisher) / Joy Bryant (Patricia) / Mary Elizabeth Winstead (Susan Taylor) / David Krumholtz (Phil) / Spencer Garrett (David Novak)
Duración: 120 minutos
Sinopsis: En el Hotel Ambassador de Los Ángeles, las vidas e historias de varias personas se entrecruzarán el día que Robert Kennedy fue asesinado en su interior tras un mitín de su campaña por la presidencia. [...]
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Estreno en España: 19 de Enero de 2006
Nota I.M.D.B.: 7/10 (2102 vots)

CRÍTICA

No es fácil realizar una película coral, a menos que seas Robert Altman. Emilio Estevez lo ha intentado en su tercer largometraje como director, y se agradece la intención, porque se intuye un muy buen fondo en esta historia llena de sinceridad y nostalgia, pero quizá intenta abarcar más de la cuenta y fracasa en la integración de todos los pequeños fragmentos en una gran obra con significado propio. Y un gran reparto no es suficiente para sustentar un film de este tipo.

En Bobby se entremezclan las vidas de más de una docena de personas en el Hotel Ambassador de los Ángeles, la víspera del asesinato del presidenciable senador Robert F. Kennedy. El film se erige en todo un homenaje a esta personalidad y, ante todo, a la propuesta política que representa. Estevez se rodea para ello de un elenco espectacular, e incluso él mismo se reserva un papel, como sufrido marido de una decadente estrella de segunda interpretada por Demi Moore. También su padre, Martin Sheen, tiene un hueco en la producción junto a Helen Hunt: una pareja con muchos años atrás que regala algunas de las escenas más conmovedoras. William H. Macy es el gerente del hotel, estrictamente moralista en sus convicciones políticas pero no tanto en las personales, ya que engaña a su mujer, una fantástica Sharon Stone, cuya peluquería sirve de pequeño refugio exorcizador para más de un personaje. Lindsay Lohan se pone en la piel de una muchacha que accede a casarse con el joven Elijah Wood para evitar que le envíen a Vietnam. Freddy Rodríguez cubre el inevitable rol del inmigrante hispano que trabaja de camarero con la esperanza de integrarse en el American Way of Life, apoyado por la sabia figura de Laurence Fishburne. Entre otros, completan el nutrido reparto el veterano Anthony Hopkins, Christian Slater, Ashton Kutcher, Joshua Jackson, o la monísima Heather Graham.

Individualmente, las historias se desarrollan con solvencia; Estevez demuestra una sensibilidad y una capacidad para dirigir actores encomiables. Son los suyos unos personajes con 'alma', que plantean conflictos bastante interesantes (unos más que otros) incluso dejando espacio para el humor. Y es una pena que dos horas no sean suficientes para ahondar en todos ellos. Tal vez el director, también autor del guión, debería haber prescindido de alguna de las subtramas y así dotar a las que quedaran de un poco más de profundidad. Aún con eso, Bobby es una película que se deja ver estupendamente. La lograda ambientación nos sumerge en la América de finales de los 60 con su aperturismo, sus inevitables tópicos sobre las nuevas drogas, y como una época llena de esperanzas para algunos. Contribuye Mark Isham con una magnífica banda sonora, eficiente y sin estridencias.

Que nadie espere ver en Bobby una gran película, pero es posible disfrutar con el desfile de estrellas en la pantalla y con el espíritu de un film que podría haber sido más de lo que queda al final. Por cierto, el epílogo, con la muerte de Robert F. Kennedy, acompañado por las palabras de uno de sus discursos, probablemente resultará más patriotero de la cuenta a cualquiera que lo vea desde fuera de las fronteras de USA.