Más Extraño que la Ficción
Director: Marc Forster
Intérpretes: Will Ferrell (Harold Crick) / Emma Thompson (Karen Eiffel) / Maggie Gyllenhaal (Ana Pascal) / Dustin Hoffman (Dr. Jules Hilbert) / Queen Latifah (Penny Escher) / Tony Hale (Dave) / Tom Hulce (Dr. Cayly) / Linda Hunt (Dr. Mittag-Leffler)
Duración: 113 minutos
Sinopsis: Después de diez años de meticuloso trabajo, la novelista [i]Karen Eiffel[/i] está a punto de completar su último y, potencialmente, mejor libro. El último desafío que le queda es pensar cómo matar a su personaje principal, [i]Harold Crick[/i]. Lo que no [...]
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Estreno en España: 19 de Enero de 2006
Nota I.M.D.B.: 7'8/10 (6855 votos)

CRÍTICA

Harold Crick lleva una vida anodina y rutinarimente controlada como inspector de hacienda, pero una mañana se levanta y descubre que una voz femenina va narrando todas sus acciones y pensamientos, hasta que en determinado momento descubre que la escritora que guía sus pasos planea matarlo inminentemente. Entonces comienza la lucha por variar el final de su historia, cambiando así su modo de ver la vida, y para ello contará con la ayuda de un profesor de literatura que intenta analizar la voz que relata su andadura. Mientras tanto, la autora de la obra se encuentra en medio de un bloqueo creativo que le impide avanzar hacia la culminación de la que pudiera ser la mejor de sus novelas.

Más extraño que la ficción parte de una premisa más que interesante, ¿qué ocurriría si descubrieras que eres el protagonista de una novela y que el autor quiere que mueras en breve? Un planteamiento que se desarrolla entre la comedia y el drama, con ciertos toques existenciales y una reflexión sobre la creación literaria. La idea de una fuerza superior que controla nuestras vidas ya ha sido tratada en películas como El Show de Truman (eso sin contar con las miles de muestras en la literatura universal) y los conflictos del autor recuerdan sin duda al más irreverente Charlie Kaufman. Y aunque pudiera parecer que estos elementos le restan originalidad al argumento, el film sale airoso de las comparaciones, eso sí, poniendo en duda el determinismo de manera bastante previsible.

Marc Foster (Monster's Ball, Descubriendo Nunca Jamás) demuestra su solvencia como director, y aunque tampoco sobresale especialmente, construye una película sobre el guión del debutante Zach Helm que consigue emocionar y divertir a partes iguales, sin que decaiga el interés en ningún momento. Un sorprendentemente comedido Will Ferrell se limita a dejarse llevar por la trama creada por la impecable voz de Emma Thompson. El actor no molesta, que ya es bastante para alguien que apenas se ha desmarcado de personajes cómicos estereotipados y facilones, aunque supongo que algo vería en él Woody Allen cuando le fichó para Melinda y Melinda... Y tan mal no debe de hacerlo, cuando la empatía que genera su personaje resulta inevitable: nadie cree que Harold merezca morir. Quienes brillan con luz propia en este caso son los secundarios que le rodean. Emma Thompson, estupenda como siempre, interpreta con especial intensidad a la desequilibrada escritora Kay Eiffel, con algunos tics y obsesiones que matiza con el temple británico que solo ella sabe aportar. Mientras tanto, Maggie Gyllenhaal se erige en musa independiente, en la piel de una reivindicativa pastelera (Ana Pascal), que despliega todo su encanto, y es que jamás podremos evitar que Maggie nos caiga bien, dentro y fuera de la pantalla. Dustin Hoffman aporta su saber hacer con un profesor de literatura sutilmente excéntrico, una entrañable figura de sabiduría en medio de tanto desconcierto. Junto a ellos, Queen Latifah y Tony Hale aportan su granito de arena.

El planteamiento estético del film funciona a la perfección desde el comienzo, de acuerdo con el cuadriculado mundo que Harold ha construido a su alrededor, y una acertada banda sonora matiza cada momento. La película está repleta de escenas brillantes, desde los momentos en que descubre la voz narradora, la visita a la psiquiatra (Linda Hunt), los encuentros en la pastelería o los interrogatorios de Hoffman, hasta los diferentes modos de morir que Kay Eiffel imagina.

Junto a las reflexiones intelectuales o filosóficas, Más extraño que la ficción presenta el descubrimiento de la vida y el amor, un mensaje optimista que consigue dibujar una sonrisa en el rostro del espectador, derramar alguna lagrimilla y en definitiva, salir del cine con una sensación de satisfacción que, al fin y al cabo, es de lo que se trata.