He aquí una de las películas mas imitadas de la historia, la que popularizó el muchas veces alicaído género de películas con la figura principal del “slasher” , un sujeto de imagen amenazante que va asesinando con cualquier tipo de objetos punzo penetrantes a chicos y chicas normalmente de muy buen ver. La historia que narra trata acerca de un enfermo psiquiátrico que se encuentra encerrado por haber asesinado a su hermana solo cuando era un niño, logra escapar vuelve a su localidad y comienza una serie de asesinatos.

A diferencia de sus referentes modernos esta obra creada por el director de culto John Carpenter en 1978 el menos intenta, aunque de forma no muy conseguida, penetrar en el perfil de los personajes principales, escasamente desarrollados donde predomina la intención del guionista para adentrar en sus motivaciones que la propia profundización de los mismos, dichos personajes al sol de hoy podrán parecer demasiado tópicos y predecibles y es simplemente porque desde el estreno de este filme los personajes de este tipo y dentro de estas situaciones han sido imitados hasta la saciedad infinidad de veces.

Aparte de su problema en el desarrollo de los personajes, lo mas importante de esta película es la consecución de su atmósfera de suspenso, Carpenter (inspirado en el trabajo del maestro Alfred Hitchcock al cual homenajea en varias oportunidades durante la cinta), va narrando la cinta con un ritmo adecuado sin prisas pero sin pausa realmente adecuado al tono plausible del filme, la historia se va narrando de manera mas o menos fluida hasta las estupendamente logradas escenas de mayor clímax. La música compuesta por el propio Carpenter sigue siendo unas de las mejores en la historia del cine y la misma esta inspirada (según palabras del mismo John) en otras dos bandas sonoras clásicas del género: El Exorcista y Suspiria. Las actuaciones no sobrepasan el promedio pero la carismática presencia de Jaime Lee Curtis le haría ganar miles de fans por todo el mundo haciéndole ganar el título de “La reina del grito”, además tenemos otro factor importante en esta cinta y es el escaso uso de sangre y violencia gratuita, dos elementos que esta película no necesita para crear una buena atmósfera de suspenso, tal vez las generaciones de hoy en día acostumbrados al frenético y muchas veces dañino ritmo videoclipero y a la extrema y muchas veces innecesaria violencia explicita, encuentren a este filme soso y suave, pero eso es simplemente no poder apreciar muchas de las otras cualidades del filme y es que es esa misma insinuación, esa omisión de la violencia siempre en aras de sugerir sobre mostrar y aún así conseguir el suspenso deseado una de las grandes cualidades de este clásico del terror.

Rodada tan solo en tres semanas y con un presupuesto de 325.000 dólares la película recaudó 47 millones solo en los Estados Unidos y generó varias secuelas de inferior calidad, por lo que también es una de las cintas más rentables de la historia.

Llena de numerosos guiños cinematográficos, filmada con un estupendo trabajo de John Carpenter en la dirección (el plano secuencia inicial es considerado uno de los mejores de la historia), Halloween no será la mejor ni la mas brillante película de horror en la historia, de hecho posee varias imperfecciones, pero su atmósfera cautivante, su gran trabajo y esfuerzo tras las cámaras y la presencia de dos de los personajes mas carismáticos de la historia del género la hacen una indispensable dentro del terror contemporáneo. Además recordemos que esta cinta se encargó de crear unas pautas dentro del género que hoy por hoy todavía se repiten hasta el infinito, solo por eso, ya merece ser visionada.

Puntuación: 8.0 sobre 10.0