A raíz del enorme éxito de “Batman” tanto en taquilla como en crítica, era de esperar que se hiciera una secuela y no se hizo esperar. En 1992 se estrenó “Batman vuelve”, contando con los principales artífices de la primera parte, Michael Keaton y Tim Burton, añadiendo además en papeles protagonistas a Danny DeVito, Michelle Pfeiffer y Christopher Walken.

Con Batman ya definido en un principio por Michael Keaton, quien cumple con solvencia su papel, nos queda ver como se comportan los demás personajes, quienes tienen que superar el difícil listón que puso Jack Nicholson como Joker. Danny DeVito se mete bajo la piel de el Pingüino, un misterioso ser mitad hombre mitad bestia que vive bajo las alcantarillas de Gotham City, con una mente alimentada por la rabia y por una insaciable sed de venganza y que está flanqueado por una legión de pingüinos y de unos peculiares freaks de un circo, quienes están dispuestos a cumplir sus órdenes. DeVito resulta el más apropiado para el papel, ya que detrás del maquillaje aporta un tono de maldad y odio que sirve para definir mejor su personaje. Michelle Pfeiffer es simplemente la perfecta Catwoman, moviéndose con gracia felina y con una sensualidad turbadora embutida en un ceñidísimo traje de cuero, sabiendo jugar con la dualidad de su personaje, seduciendo no sólo a Batman sino también al espectador. Detrás de su belleza se esconde, se encuentra una mujer letalmente peligrosa, que lucha con feroz energía… aprende Halle Berry. También interviene Christopher Walken, que hace de un villano, no tan feroz como los anteriores, pero con pensamientos malvados.

“Batman Vuelve” se puede considerar algo más que una digna secuela. Como suele suceder en las primeras partes de muchas películas, estas consisten en explicar con detalle a todos los personajes principales y en este caso “Batman” sirvió para darnos a conocer al misterioso hombre murciélago. En “Batman Vuelve” se retoma esa explicación, pero haciéndose más manifiesta en los villanos que intervienen, como Pingüino y Catwoman. Al ser Batman un personaje del cual ya tenemos conciencia de cómo es y actúa, no nos sorprende que en la primera media hora su presencia no sea notable, a no ser por un par de intervenciones. Es más, el guión se inclina más hacia a darnos a conocer como son Catwoman y Pingüino, además de ser una historia más llena de acción en todos los sentidos. De todas maneras, Batman sigue siendo el protagonista absoluto y vemos en él más cualidades tanto físicas como de recursos.

El guión sigue teniendo ese ambiente oscuro, gótico y sombrío que poseía la anterior película, pero “Batman Vuelve” es la más burtoniana de las dos, ya que el mundo que recrea el director es más variado, no es tan limitado como en la primera parte, en esta hay más riqueza visual en los decorados, ya que estos son más grandes y diversos. Aún así, Burton maneja ágilmente la película, ofreciendo un gran ritmo a todo el metraje, con abundantes secuencias de una sutil acción y añadiendo cierto erotismo a algunas escenas entre Batman y Catwoman. Otro de los elementos a tener en cuenta son los pingüinos creados por el mago Stan Winston, de un detalle casi perfecto. Danny Elfman retoma de nuevo la banda sonora, siendo más efectiva que en la anterior película.

Aunque no recaudó tanto como “Batman”, esta secuela es un complemento ideal para esa primera parte y es una lástima que fuera la última intervención de Keaton y Burton en la saga, ya que ellos dos consiguieron dar a este superhéroe la adaptación al cine que merecía, pero eso no fue obstáculo para que años después llegara la tercera parte, “Batman Forever”