Si preguntamos por un director ligado al cine de mafias y gángsteres, nos dirán que a parte de Coppola el amo y señor del genero es Martin Scorsese y nos lo vuelve a mostrar en Casino, con como no, De Niro y Pesci.

En poco menos de 3 horas, el director nos cuenta la ya habitual historia de éxito primero y fracaso después de un hombre (De Niro) que se hace con el control del casino mas importante de Las Vegas.

Pese a su duración, la película transcurre sin hacerse pesada combinando momentos frenéticos con otros totalmente dramáticos, combinado todo con narraciones en primera persona por los dos protagonistas, De Niro y Pesci, haciendo ver al espectador una misma situación desde dos puntos de vista lo que ayuda a comprender la extraña relación entre los dos personajes, para llegar a un final, que aunque al igual que en American Beauty se narra al principio del film, llega a sorprender.

Estamos ante el último buen papel de De Niro hasta el momento que casa perfectamente con su ya habitual pareja Pesci, y con un gran papel de Sharon Stone que no se limita ha realizar el típico papel de Señora de, sino que aprovecha muy bien el papel y alcanza registros que no se habían visto en esta actriz, merecido pues el Globo de Oro que ganó por su actuación en la cinta. De destacar también todos los papeles secundarios, en especial el de James Woods, papel que creo le supuso el impulso que le faltaba en su ya buena carrera.

Quizás la única pega que encuentro en la película sea el sonido. La banda sonora es un poco pobre incluso para lo que nos tiene acostumbrado el director. En algunas escenas se hace patente la falta del toque musical para afianzar la acción, que por otra parte, y como es habitual, se compensa con una fotografía magistral por parte de Richardson, encargado también de la fotografía de éxitos recientes tales como Kill Bill o El Aviador.

En definitiva, quien se quedó con ganas de más después de ver Uno de los nuestros, no puede dejar de ver esta gran película. Son los mismos actores, el mismo director, distinta época y distinto escenario para un film que no tiene nada que envidiar a sus predecesoras.

9/10