Una Noche con mi ex suegro
Director: Gavin Wiesen
Intérpretes: Analeigh Tipton (Ginnie) / Emile Hirsch (Martin) / J.K. Simmons (Mr. Gallo) / Meta Golding (Kelly) / Jon Daly (Jimothy) / Taran Killam (Gary) / Kristen Schaal (Roberta) / Stephanie Allynne (Tracy) / Rebecca Drysdale (Lizzie) / Connor Barrett (Dean) / Blake Perlman (Camarero) / Xosha Roquemore (Megan) / Shannon Woodward (Lois) / Jon Bass (Trevor) / Trenton Rostedt (Bri-Baby) / Bojesse Christopher (Camarero) / Milana Vayntrub (Terri Sadler)
Duración: 86 minutos
Sinopsis: Cuando el señor Gallo descubre que su querida hija ha desaparecido, se ve obligado a formar equipo con su torpe exnovio para encontrarla en el transcurso de una noche transformadora. [...]
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Estreno 30 de Junio de 2017

CRÍTICA

Aprovechando que tenemos un personaje potente (el duro Terence Fletcher de Whiplash) le añadimos un trabajo enigmático, el mismo carácter duro, una hija que tiene bastante abandonada y le planteamos situaciones de comedia en una noche agitada: éxito asegurado. Eso debieron pensar los guionistas de esta película a la hora de abordarla, pero se olvidaron de lo más importante: hacer reír.

De acuerdo en que ver a J.K. Simmons en determinadas situaciones resulta curioso y de acuerdo que verle también en un sencillo concierto aplaudiendo las pocas virtudes de una sencilla banda también. Pero para hacer una comedia algo más interesante se necesita mucho más, y con esta película tenemos muy poco. Casi nada.

Cierto es que tras el discreto debut de Gavin Wiesen con El Arte de pasar de todo de hace seis años, tampoco podíamos esperar una maravilla, pero cierto es también que esta película es inferior a la anterior y no nos deja ningún buen sabor de boca para esperar mucho en el futuro...

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El guión nos presenta a un decepcionado y joven Martin que hace meses lo dejó con su novia, y al que se le presenta en su propia casa su ex suegro para que le ayude a buscar a su hija (su exnovia). A partir de ese momento la película se convierte en una especie de road movie urbana donde los personajes principales son muy flojos, y donde los secundarios son realmente peores, unido a una consecución de los acontecimientos tan previsibles que apenas dejan margen a algún divertimento a lo largo de la película.

Todo es muy manido con tendencia a la risa tosca y con poca habilidad para que las situaciones adquieran cierto grado de comedia o los personajes puedan ser ligeramente divertidos. Todo funciona de manera rápida (por fortuna a veces) y tan sólo la curiosidad de saber si encontrarán a la tan buscada Kelly presenta algún interés en este conjunto de situaciones vistas unas cuantas veces y poco divertidas.

Una segunda película de un director que busca el entretenimiento como base principal sin ningún tipo de pudor a la hora de repetir consignas y artificios de la mala comedia americana.






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