Invasor
Director: Daniel Calparsoro
Intérpretes: Alberto Ammann (Pablo) / Antonio de la Torre (Diego) / Karra Elejalde (Baza) / Inma Cuesta (Ángela) / Sofía Oria (Pilar) / Bernabé Fernández (Soldado pelirrojo) / Luis Zahera (Arturo) / Fran Peleteiro (Ramón) / Julio Pereira (Carlos) / Isabel Blanco (Doctora) / Antonio Durán 'Morris' (Hombre en bar)
Duración: 99 minutos
Sinopsis: Tras un atentado que casi le cuesta la vida, Pablo, un médico militar español destinado en una misión internacional, regresa a casa convaleciente junto a su mujer y su hija. Al recuperar la memoria de lo ocurrido, Pablo sospecha que le [...]
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Estreno en España: 30 de Noviembre de 2012
CRÍTICA
Son pocos pero aún quedan en España cineastas que se atreven (o les dejan atreverse) a hacer cine de género, huyendo de los estereotipos y clichés que vienen dejando la sensación de que el cine español por definición es un género propio. Menos mal que a veces directores como
Enrique Urbizu o, como en este caso,
Daniel Calparsoro, demuestran con creces que más allá de comedias de medio pelo y guerras civiles mil veces removidas, también se pueden tocar otros terrenos sin desmerecer en absoluto a lo que viene de fuera y no ya no tropezar en el intento, sino además consiguiendo resultados más que aceptables. En ese sentido, Calparsoro no se resiente de los siete años que ha estado alejado de los rodajes y vuelve a entregar un sólido trabajo que se apoya en los daños colaterales de los que se ven involucrados en conflictos bélicos, y que sale a flote entre otras virtudes por la excelente, como de costumbre, dirección de actores por parte del director barcelonés.
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Adaptando la introspectiva novela de
Fernando Marías, Calparsoro vuelve a hablar de militares cambiando el Kosovo de
Guerreros por las labores humanitarias en Irak y lo hace, si exceptuamos el momento clave de la cinta, sin pararse a juzgar lo que allí ocurre ni pretender señalar a nadie en concreto. De hecho, supongo que intencionadamente, se lava las manos de posibles interpretaciones haciendo que la puntilla en la escena que marca todo el conflicto dramático la dé precisamente un soldado español. Así, moviéndose entre terrenos como el drama y la acción (impresionante persecución por el casco urbano de A Coruña), el guión se pierde un poco en las distancias cortas pero se mantiene por el ritmo ágil con el que está montada.
El guión, esa pata de la que cojea habitualmente Calparsoro durante toda su filmografía, tiene ciertos momentos en los que queda cerca de la caricatura. La culpa de que no caiga en ella se le puede echar al acertado casting que consigue hacer creíble todo el entramado.
Alberto Ammann, pese a su aún corta trayectoria, vuelve a demostrar que está plenamente capacitado para liderar una película y dar cumplida réplica a sus compañeros de reparto, como en este caso a un contenido
Antonio de la Torre tan solvente como de costumbre o a un
Karra Elejalde al que tan bien le sientan estos personajes oscuros y siniestros.
Más allá de todo ello, otro aspecto digno de mención es la dirección artística y el uso de la luz en las localizaciones. Si ya de por sí el clima de A Coruña da el tono necesario para la parte española, descubrir que toda la parte de Irak ha sido rodada en las islas canarias, vuelve a demostrar que en cine se puede hacer cualquier cosa aún con presupuestos casi ridículos siempre que haya talento detrás.