Pandorum
Director: Christian Alvart
Intérpretes: Dennis Quaid (Payton) / Ben Foster (Bower) / Cam Gigandet (Gallo) / Norman Reedus (Shepard) / Antje Traue (Nadia) / Cung Le (Manh) / Eddie Rouse (Leland) / André Hennicke (Líder de los cazadores)
Duración: 108 minutos
Sinopsis: El film nos contará como dos miembros de una nave espacial despiertan inesperadamente de su letargo para llevarse la ingrata sorpresa de que no se conocen, no saben donde están, y no entienden como han llegado a ese lugar. Poco a [...]
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Estreno en España: 6 de Noviembre de 2009

CRÍTICA

La claustrofobia del espacio es un género que no ha sido desaprovechado, y aunque ver escrito el nombre de Paul W.S. Anderson en labores de producción puede darnos algo de miedo, esta vez el resultado es bastante aceptable. Veamos qué nos ofrece esta particular mezcla de "The Descent" y "Horizonte final".

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Payton y Bower despiertan en una nave espacial de la que sólo sabemos busca un nuevo lugar donde la humanidad pueda subsistir, pues los recursos en la Tierra se acaban. Debido a una especie de "jet lag" espacial los personajes van recordando poco a poco cómo han llegado ahí y cuál es su papel. El problema es que en la nave no está solos: unos monstruitos, de lo más sanguinario y con un gran parecido a los mencionados de "The Descent" les harán pasarlas canutas. Y hasta aquí puedo leer, es mejor descubrirlo todo al mismo tiempo que los protagonistas.

El gran logro de Pandorum es su perfecta ambientación espacial, no empañada por sentimentalismos, con sus dosis justas de gore, personajes desquiciados y cambios de bando (que nadie espere algo similar a "Moon"). Los actores están más que aceptables, desde un Dennis Quaid que, el pobre, no se entera de nada, hasta un Ben Foster que poco a poco se hace un hueco (merecido) en Hollywood sin interpretar para variar al villano.

El resto está servido: banda sonora tétrica, sustos de rigor, alguna pelea, y sobre el Pandorum, la angustia espacial producida por los largos años aislado de la Tierra. No engaña a nadie, y ofrece una vuelta de tuerca más a la idea Marciano-en-el-espacio, aunque a años luz por supuesto de "Alien". Sin duda recomedable para los fans de naves espaciales gigantes y laberínticas con deformes criaturas deseando incarte el diente.